Lunes de la I semana del tiempo ordinario

Unos minutos con Dios

Empezamos la oración de la mañana: En el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.

Lee y medita la Palabra de Dios. Si es necesario, léala de nuevo usando tu propia Biblia:

Evangelio según San Marcos 1, 14-20

Después de que arrestaron a Juan el Bautista, Jesús se fue a Galilea para predicar el Evangelio de Dios y decía: “Se ha cumplido el tiempo y el Reino de Dios ya está cerca. Arrepiéntanse y crean en el Evangelio”.

Caminaba Jesús por la orilla del lago de Galilea, cuando vio a Simón y a su hermano, Andrés, echando las redes en el lago, pues eran pescadores. Jesús les dijo: “Síganme y haré de ustedes pescadores de hombres”. Inmediatamente dejaron las redes y lo siguieron.

Un poco más adelante, vio a Santiago y a Juan, hijos de Zebedeo, que estaban en una barca, remendando sus redes. Los llamó, y ellos, dejando en la barca a su padre con los trabajadores, se fueron con Jesús.

Oración: dedica unos minutos a tener un diálogo espontáneo con Cristo de corazón a Corazón; intercede por tu familia…

Señor, danos la gracia de seguir tu llamado, cueste lo que cueste.

Señor Dios nuestro, hoy tú nos invitas  a ser discípulos de tu Hijo, a convertirnos totalmente al evangelio y a ayudar a extender tu reino. Danos corazones abiertos al evangelio y generosidad para compartirlo con los hombres de nuestros días. Que él Señor nos ayude.

Contempla la Palabra de Dios (en silencio, deja actuar en ti al Espíritu de Dios). Actúa y conserva la Palabra en tu vida hoy. 

Repite con frecuencia y vive hoy la Palabra: «Síganme y haré de ustedes pescadores de hombres». (Marcos 1, 17)

Alma de Cristo, santifícame. Cuerpo de Cristo, sálvame. Sangre de Cristo, embriágame. Agua del costado de Cristo, lávame. Pasión de Cristo, confórtame. ¡Oh, buen Jesús!, óyeme. Dentro de tus llagas, escóndeme. No permitas que me aparte de Ti. Del enemigo, defiéndeme. En la hora de mi muerte, llámame. Y mándame ir a Ti. Para que con tus santos te alabe. Por los siglos de los siglos. Amén.

Para las lecturas del día, por favor vaya aquí.

Para Lectura Espiritual

En el evangelio de hoy Jesús empieza a predicar la venida del reino de Dios en medio del pueblo. Convoca a la penitencia y a la conversión y elige sus primeros discípulos. Jesús nos dirige a nosotros hoy estas mismas palabras: “¡Arrepiéntanse, conviértanse, sean pescadores de hombres para el reino”.

Comentarios de Facebook

Deja un comentario

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.